El cuidado de personas dependientes se ha convertido en una responsabilidad esencial para muchos, por lo cual gestionar el estrés asociado con esta tarea es fundamental. El cuidado de personas dependientes, unido a las exigencias personales del día a día, puede conllevar consecuencias sobre la salud física y emocional de los profesionales y familiares cuidadores.
En el día a día surgen situaciones muy variadas a las que los cuidadores deben dar respuesta. Desde el estrés que supone un pequeño accidente, enfermedad repentina o contagio, hasta el duelo por la pérdida de la persona a la que lleva tiempo atendiendo y con la que ha establecido lazos emocionales, pasando por conflictos interpersonales con familiares, compañeros y la propia persona dependiente. Son todas, situaciones que requieren tener fortalecida la Inteligencia Emocional y crear hábitos de autocuidado personal que redunde asimismo, en mayor calidad de trato a la persona dependiente.
Por tanto, abordar este tema es vital, ya que el bienestar del cuidador repercute directamente en la calidad del cuidado que se ofrece.
A través de este curso, podrás adquirir herramientas prácticas y efectivas para gestionar tu estrés que podrás integrar en tu día a día, mejorando tu bienestar emocional y el de las personas que están a tu cuidado.